EN EL PALADINO
Progreso y River Plate disputaron un interesante encuentro, pero que terminó sin goles.
Puede que suene extraño que un encuentro sin goles sea interesante, pero lo cierto es que Progreso y River Plate dieron un buen espectáculo en el que no pudieron anotarse.
Lo que generó que el encuentro no haya sido aburrido es que la ausencia de goles no fue por errores propios sino por aciertos ajenos. Las defensas de ambos equipos tuvieron una tarea muy destacada y eso explicó la igualdad sin tantos en el Parque Abraham Paladino.
Gonzalo Castillo, por el lado local, y Deivis Barone, por el visitante, fueron los que cimentaron la buena tarea de la última zona.
La velocidad de Alexander Rosso y de Facundo Boné fue lo que más inquietó pero no fue suficiente para que los hinchas que llegaron al escenario de Progreso vean goles en una tarde que dejó un atractivo empate con gusto a poco.