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Conflicto entre Estados Unidos e Irán podría quitar el Mundial a Catar

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Kylian Mbappé con el trofeo de la Copa del Mundo. Foto: AFP
France's forward Kylian Mbappe kisses the trophy at the end of the Russia 2018 World Cup final football match between France and Croatia at the Luzhniki Stadium in Moscow on July 15, 2018. RESTRICTED TO EDITORIAL USE - NO MOBILE PUSH ALERTS/DOWNLOADS / AFP / Kirill KUDRYAVTSEV / RESTRICTED TO EDITORIAL USE - NO MOBILE PUSH ALERTS/DOWNLOADS FBL-WC-2018-MATCH64-FRA-CRO
KIRILL KUDRYAVTSEV/AFP

COPA DEL MUNDO

La FIFA ya había sondeado a México, Canadá y el mismo EE.UU. para conocer su situación en caso de tener que asumir la organización de la Copa del Mundo 2022 a último momento.

La tensión que existe entre Estados Unidos e Irán, por el asesinato del general Qasem Soleimani, jefe de las fuerzas armadas iraníes, tendría repercusión en el Mundial de Catar 2022, pues provocaría que el país asiático perdiera la sede y provocaría que el bloque formado por EE.UU, Canadá y México, tome su lugar.

Catar, señala el columnista de El Universal Javier Tejado Dondé, vive desde junio del 2017 un bloqueo de parte de varios países del área asiática como Arabia Saudita, Egipto, Senegal, Jordania y Suiza por según ellos "promover el terrorismo de la mano de Irán"...

Desde esa fecha la FIFA "sondeó a Estados Unidos, Canada y México, que serán sedes en el 2026, "para saber si de requerirse, podrían adelantar y hacer lo que le toca a Catar", y los representantes de los países, coordinados por Robert Kraft, dueño de los New England Patriots, dijeron que estarían listos.

El columnista señala que Catar había convencido a la FIFA de que a pesar del bloqueo el Mundial saldría bien, pero el asesinado del general Qasem Soleimani ha vuelto a generar que las dudas crezcan y la posibilidad de que se le quite la sede a Catar para darla a los organizadores del 2026 crece.

Si esto sigue así, la FIFA deberá anunciarlo a mediados de este año.

Esto sería bien visto por los principales patrocinadores y las televisoras, que desde un inicio no quedaron del todo satisfechas con el horario y las fechas (noviembre) en que se disputarían los juegos ya que el rating no sería tan alto como se esperaba.

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