Más que las delanteras, el clásico de esta tarde lo van a definir las defensas. Y desde ese punto de vista ninguno de los dos entrenadores dio señales de gran confianza.

Los puntos débiles tanto de Nacional como de Peñarol en este Apertura ha sido la fragilidad en la retaguardia. Ambos han recibido la misma cantidad de goles (14), pero han sido capaces de transformarse en los equipos más anotadores del certamen, con 25 y 24 tantos, respectivamente. En buen romance, han aplicado el axioma de que no hay mejor defensa que un buen ataque. Sin embargo, cuando estén frente a frente, la ventaja la sacará el que se pare más firme en el fondo. El problema no está de mitad de cancha hacia adelante, donde ambos grandes tienen un potencial individual muy grande que les ha permitido hasta ahora disimular las intermitencias en el funcionamiento colectivo. Nacional tuvo un mejor inicio de campeonato como equipo, pero en estos momentos es Peñarol el que muestra un mejor funcionamiento.

Los laterales son el punto de inflexión en ambos bandos. El equipo que sea capaz de cubrirlos mejor será el ganador.

el análisis por daniel rosa