ELIMINATORIAS

Ganar, más que nunca, es lo único que importa para la Selección uruguaya de fútbol. Para que las cuentas sean bien clara, para que la triple fecha de septiembre empiece a entregar un camino más despejado hacia Catar 2022 la Celeste no puede permitirse volver a dejar unidades como locatario y, mucho menos, frente a un adversario que hace 58 partidos que no sabe lo que es lograr una imposición en calidad de visitante.

El punto sumado en Lima como visitante de Perú solamente podrá ser defendido de la mejor manera si las seis unidades que se pondrán en juego ante Bolivia y Ecuador quedan en las arcas uruguayas. Cualquier otra circunstancia empezará a construir una ruta de espinas y con un ruido mediático que provocará que se altere el mejor clima. La Selección del Altiplano es, además, uno de los oponentes que menores inconvenientes suele presentarle a Uruguay cuando se da una vuelta por Montevideo.

Aunque ahora se cambiará el escenario, porque no se jugará en el Centenario y la localía se ejercerá en el Campeón del Siglo (desde la hora 19), situación que incluso le parece extraña al técnico Óscar Tabárez por la costumbre de prepararse para ir a competir al Monumento Mundial al Fútbol, no puede desconocerse que los antecedentes son muy favorables a Uruguay y con marcadores contundentes.

Una mejor exposición futbolística de Uruguay, exhibida frente al Perú de Ricardo Gareca, alimenta aún más la sensación de que el resultado que se precisa es alcanzable. Y con esa convicción entrarán a la cancha los jugadores designados por Tabárez.

Así lo dejaron en claro Rodrigo Bentancur y Giorgian De Arrascaeta en sus declaraciones. El “Cocho” no anduvo con muchas vueltas. “Sabemos cómo juega bolivia, pero tenemos que pensar en nuestro equipo. Tenemos que ganar y hay que aprovechar al máximo sus falencias”.

Rodrigo, por su parte, afianzó su confianza en la expectativa que existe de poder “hacer el mismo trabajo que hicimos contra Perú. Hay que estar bien parados, defender bien e ir por la victoria porque hay que empezar a encaminar el camino al Mundial”.

El equipo que intentará repetir la buena tarea desarrollada en Lima, especialmente en la primera mitad, tendrá dos modificaciones. Matías Viña, que debió ser sustituido por una dolencia muscular y ayer hizo trabajos diferenciados, le deja su lugar a Joaquín Piquerez, quien contra Perú estuvo a centímetros de meter el mejor gol de las Eliminatorias.

La otra variante que tendría la oncena titular sería la del ingreso de Agustín Álvarez Martínez por Maximiliano Gómez. El delantero del Valencia de España fue el jugador de menor rendimiento ante Perú y el “Canario”, además de encontrarse en un pico alto de su nivel deportivo está más que acostumbrado a jugar en el CDS.

Bolivia, en tanto, un rival que trató de aferrarse a un gran sistema defensivo frente a Uruguay en la Copa América, al punto tal que disparó al arco nada más que en cuatro ocasiones contra 22 disparos celestes, tiene en sus filas al artillero actual de las Eliminatorias: Marcelo Martins.

Ese es, al menos en lo previo, en el único jugador que puede llegar a provocar algún dolor de cabeza. Eso sí, hay que encontrar el remedio para ello y jugar con una idea fija. Es que ganar es lo único que importa.

Tres frases

Lo que dijo el maestro

1)  Objetivo
“Es un partido de irlo a ganar y no como una expresión de deseo si no teniendo todas las luces bien encendidas, por así decirlo, que hacen a este objetivo. Es muy probable que nos cueste bastante, pero hay que cumplir el objetivo”.

2) El público
“En el fútbol es esencial. Es una parte muy importante del espectáculo del fútbol. Tiene mucha influencia en la relación de fuerza y sobre todo cuando ese plúblico juega a favor de la Selección como lo hizo en el camino hacia Rusia”.

3) Bolivia
“Es un equipo muy lógico, organizado y que da lucha. En cuanto a su integración bastante parecido al de la Copa América. Tiene individualidades importantes. Tenemos que hacer las cosas que necesitamos para cumpllir con el objetivo”.