NACIONAL

El Chory es un hombre clásico. Lleva solo cuatro goles en la temporada, pero tres de ellos fueron en partidos frente a Peñarol.

El 1°de septiembre, Gonzalo Castro había sido la gran figura del clásico del torneo Intermedio, donde Nacional ganó 3 a 0 y dos de los tantos fueron del Chory.

Y ayer, Castro abrió el marcador y cambió el partido. Su gol llegó en un momento en que Peñarol había comenzado mejor el complemento tras un primer tiempo bastante parejo, en el que los tricolores fueron más en los últimos 20 minutos. En ese lapso tuvieron varias posibilidades de anotar, una del propio Chory, y terminaron convirtiendo a Thiago Cardozo en figura.

Sin embargo, los albos no salieron de la misma manera a jugar el segundo tiempo y los primeros minutos fueron de dominio aurinegro. Hasta el gol del Chory a los 61’.

La jugada previa fue toda de Matías Zunino, otra de las buenas figuras de Nacional, pero Castro lo vio venir y se acomodó para sacar un latigazo bajo que se estrelló contra la red en el arco de Cardozo.

Inmediatamente, el Chory fue sustituido dejándole su lugar a Sebastián Fernández. Acababa de hacer el gol y la ovación no demoró en bajar desde la Colombes. Gutiérrez, con una enorme sonrisa, lo esperó con los brazos abiertos. Y lo mismo hizo su ayudante, Mario Picún.

Es que generalmente, Castro no juega más de 60 o 70 minutos, pero a los hinchas no les preocupa. Total, ese lapso le alcanza para hacer los goles más importantes, los de los clásicos.

El Chory apenas tuvo tiempo de sentarse en el banco, cuando volvió a levantarse como un resorte. Es que cuatro minutos más tarde llegó el segundo gol, anotado por Germán Corujo de cabeza.

Castro se abrazó con Mejía, quien se acercó al banco a celebrar. Y luego con los suplentes. A partir de ese momento, Nacional creció en el partido y Peñarol se desmoronó.

Para complicar aún más a los aurinegros, dos minutos después del gol de Corujo, fue expulsado Enzo Martínez.

Nacional terminó dominando a su rival, física y anímicamente. Y todo por el gol del Chory que cambió el partido y dejó a Nacional con el Uruguayo servido en bandeja.