La FIFA anunció ayer la suspensión de su secretario general, Jérôme Valcke, horas después de que un ex futbolista lo acusara de revender entradas para el Mundial de Brasil 2014.

La entidad que rige el fútbol mundial, que se ha visto sacudida por un escándalo de corrupción destapado por autoridades de Suiza y Estados Unidos, pidió que su Comisión de Ética lleve adelante una investigación al respecto.

"Jérôme Valcke ha sido cesado de sus funciones con efecto inmediato y hasta próximo aviso. Se han puesto en conocimiento de la FIFA ciertos alegatos acerca del Secretario General y la FIFA ha solicitado a la Comisión de Ética de la FIFA que inicie una investigación formal", dijo la entidad en un comunicado.

La FIFA no especificó cuáles son las acusaciones contra Valcke, pero su abogado dijo que el dirigente niega los cargos sobre reventa de localidades.

Más temprano ayer, el ex futbolista israelí Benny Alon dijo en rueda de prensa en Zurich que en 2013 acordó pagarle a Valcke para asegurarse localidades preferenciales. Dijo que el plan era revenderlas a precios mayores y dividir las ganancias con el dirigente.

Alon sostuvo que el acuerdo no se materializó y que nunca le pagó nada a Valcke. Reuters no pudo confirmar los dichos de Alon por una fuente independiente.

FIFA controla los derechos de venta de todas las localidades del Mundial y en el pasado ha sancionado a dirigentes por revender los boletos a precios inflados.

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