PEÑAROL

Cerrar el tema económico es lo que falta para que el ecuatoriano Carlos Garcés se convierta en nuevo jugador de Peñarol.

El delantero de 29 años, que tiene contrato vigente con Delfín de Ecuador (equipo del que además es el capitán), podría ser la primera alta en este período de pases mientras el plantel aurinegro continúa de pretemporada en Estados Unidos, donde anoche jugó el primer partido amistoso de los tres que tiene previstos.

“Hay conversaciones y si bien están muy avanzadas, todavía no hay nada definido. Nosotros estamos esperando el regreso de nuestro presidente (José Delgado), que se fue a la Copa América de Brasil, y una vez que vuelva se verá cómo se prosigue”, le contó a Ovación Mauro Rezabala, Gerente de Delfín.

Garcés fue parte del plantel de Ecuador en la Copa América en la que el equipo del “Bolillo” Hernán Darío Gómez quedó eliminado en la fase de grupos tras perder con Uruguay y Chile y empatar con Japón. En este certamen, el delantero disputó 21 minutos en la derrota ante los chilenos.

El punta ecuatoriano es surgido en las inferiores de Manta, luego pasó por Portoviejo, regresó a Manta, fue a Liga de Quito, jugó en Deportivo Quito para después tener otro pasaje por Portoviejo y luego llegar a Deportivo Cuenca, donde tuvo su primera salida al exterior.

Atlante de México fue el destino y en su primera temporada en el club azteca convirtió 21 goles.

En 2017 regresó a Ecuador para ponerse la camiseta de Delfín y hasta ahora lleva anotados 48 tantos.

Según contó Rezabala, lo que falta es “cerrar el tema números. Si Peñarol ofrece lo que Delfín pide, no habrá problemas para que Carlitos pueda salir al exterior. Él está muy bien acá y tiene una excelente relación con nosotros, el resto de los jugadores y el cuerpo técnico, pero no ve con malos ojos tener una nueva salida a otro mercado”.