TORNEO INTERMEDIO

Álvaro Gutiérrez lo había trabajado en la semana y era la duda que tenía todo el ambiente futbolístico previo al clásico respecto a la oncena de Nacional: si finalmente confirmaba la presencia de Felipe Carballo entre los titulares y cambiaba el sistema táctico a un 4-1-4-1.

Fue lo que pasó y Nacional sacó rédito de esa elección. Porque Rafael García, Felipe Carballo y Gabriel Neves redondearon un gran partido.

“Rafa” fue el volante tapón, mientras que los mediocampistas más jóvenes jugaron unos metros más adelante, con Matías Zunino a la derecha y Gonzalo Castro a la izquierda y con el goleador Gonzalo Bergessio en ataque.

Después de los primeros 20 minutos en el que el juego fue friccionado, con mucho pelotazo y sin situaciones de gol, Nacional ajustó su estrategia y salió a presionar más arriba.

“La estrategia estaba bien pero en los primeros minutos nos faltaba cortar los circuitos que queríamos, (entonces) corregimos, salimos más adelante y aparecieron los goles que nos dieron la tranquilidad para mejorar en la cancha, creer en el trabajo que estábamos realizando, le dio confianza a los jugadores”, explicó Gutiérrez tras el partido.

Es que con ese adelantamiento Nacional empezó a recuperar la pelota más arriba y contribuyó para que Peñarol tuviera una tarde para el olvido en la entrega de la pelota, donde falló constantemente, incluso jugadores que habitualmente son confiables.

La maraña que generaron García, Carballo y Neves fue casi que insuperable para el mediocampo aurinegro. Cuando Peñarol circulaba la pelota por el medio, siempre aparecía uno para cortar, mientras que si el rival buscaba a Giovanni González o Agustín Canobbio, tanto Carballo como Neves se volcaban con criterio a las bandas y se complementaban bien a Zunino y Castro, que ayudaron mucho en la marca.

Daba la impresión que Nacional siempre lograba la superioridad numérica en cualquier lugar de la cancha. El equipo estuvo a la altura. Felipe Carvalho fue prácticamente el único que tuvo alguna falla que bien pudo haber desembocado en un gol de Peñarol, como en el mano a mano que erró Gastón Rodríguez.

Entre los volantes, Carballo fue el que más sobresalió, porque además coronó la tarde con un gol, y antes había tenido una situación muy propicia para anotar. Pero García (una garantía en los clásicos) y Neves tuvieron una buena actuación. Tácticamente, Nacional también goleó a Peñarol.