Tomás Costa: la figura del mediocampo de Peñarol, es hincha de Rosario Central y seguirá a su otro equipo en esta Copa. "Si les dan 30.000 entradas las agotan", dijo de la hinchada canalla.

Tomás Costa nació el 30 de enero de 1985 en Oliveros, un pueblo ubicado en la Provincia de Santa Fe a unos 60 kilómetros de una de las ciudades más futboleras del mundo: Rosario. Dividida por dos instituciones, Central y Newell’s, el joven Tomás heredó la pasión por el primero de ellos. Años después, cumpliría el sueño de entrar a las formativas del club y jugar dos temporadas con el equipo de Primera donde disputó 47 partidos y marcó tres goles.

Sin embargo, a sus 31 años y con la camiseta de Peñarol en el pecho, aún le sigue corriendo sangre "Canalla" por las venas. Se casó hace un año, con una rosarina hincha de Central, con la que hoy comparte su vida en Montevideo pero con la que para ellos, como dice la canción de Fito Páez: "Rosario siempre estuvo cerca". "Su familia es fanática… ¡pero fanática en serio!", aclara con un tono perceptiblemente rosarino (arrastra un poco más las letras, como los porteños, pero de vez en cuando se come una "s").

Costa hace una pausa, como las que mete en el mediocampo, y continúa: "Ahora vienen a jugar dos veces a Uruguay, porque están en el Grupo de Nacional y River. La gente allá está como loca. Hace mucho que no juegan la Copa y para ellos, esto es cerca. Es como ir a Buenos Aires".

"No sé en qué canchas van a jugar esos partidos. Si en el Centenario, en el Campus o donde sea, pero si les dan 30.000, las agotan todas", agrega.

Mientras define la rivalidad de la ciudad como "mucho más que Boca-River", se ilusiona con comenzar la Libertadores con buen pie con Peñarol. Se enfoca en el Grupo 4, pero de reojo también mira el Grupo 2…

COPA LIBERTADORESÁNGEL ASTEGGIANTE