APERTURA Y LIBERTADORES

El equipo de Diego López no repite las actuaciones anteriores y no logra resultados, pero de todas maneras, aún tiene margen y tiempo para mejorar porque está en carrera en los dos frentes: Torneo Apertura y Copa Libertadores.

En un momento cumbre de la temporada, Peñarol muestra una cara que no es la mejor dentro de la cancha. El equipo no juega bien y por momentos siente la ausencia de figuras importantes.

De una racha de cinco victorias consecutivas entre Torneo Apertura y Copa Libertadores de América, el carbonero pasó a sumar dos juegos sin triunfos en una recta final en la que más allá de esos dos traspiés (empate con Cerro y derrota ante San José de Oruro), sigue peleando por el título del campeonato local y también por avanzar a los octavos de final del máximo certamen continental de clubes.

Aquella recordada y memorable victoria contra Flamengo en el Estadio Maracaná fue de las últimas grandes demostraciones de fútbol de un equipo que contó con casi todas sus figuras en una noche redonda en Río de Janeiro y que venía de golear a Boston River 4-0.

Luego, contra Danubio, supo defender la ventaja y aprovechar una de las pocas chances claras de gol y días más tarde ante Liga de Quito, jugó un muy buen segundo tiempo y anotó un tanto para sumar tres puntos de oro.

Esa seguidilla de cinco encuentros se cerró con un complicado partido ante Plaza Colonia y el aurinegro, sin jugar bien, se llevó los tres puntos del Estadio Profesor Alberto Suppici.

Una semana después, el rival de Peñarol fue Cerro, que llegaba último en el Apertura. Generar pocas chances de gol y tener algunos errores defensivos le costaron caro al aurinegro: 1-1.

El miércoles y más allá de jugar a 3.800 metros de altura, el equipo de Diego López volvió a tener fallas en la última zona y además, solo logró concretar una de las pocas situaciones que generó como para convertir.

De cara a 15 días que serán vitales, Peñarol debe mejorar en muchos aspectos para poder seguir peleando por el título del Apertura y también por la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores. Está en carrera.

Los resultados

No se están dando

En los últimos dos encuentros Peñarol no logró ganar. Por el Apertura empató 1-1 con Cerro y de todas maneras se mantuvo como único líder, mientras que por la Copa Libertadores de América cayó 3-1 con San José de Oruro en Bolivia y la clasificación a octavos de final quedó comprometida.

Las ausencias

Jugadores de nivel que se extrañan y mucho 

Diego López no ha podido repetir el equipo. Lesiones y descanso con rotación del plantel fueron las causas, pero sin lugar a dudas el aurinegro siente y mucho la falta de sus figuras cuando no están, como por ejemplo Walter Gargano, un clase “A” que tiene el carbonero y el “Toro” Fernández, un goleador.

El rendimiento

En el debe en los últimos encuentros

Peñarol se había caracterizado por el buen juego con la pelota: transiciones rápidas, uso de las bandas, mucha generación de fútbol y delanteros activos. Eso no se vio en los últimos encuentros y el equipo lo siente. Ya no es el mismo del inicio del Apertura, pero tiene madera para seguir trabajando y mejorar.

La defensa

Sufre cuando le llegan con mucha gente

En los últimos dos partidos y también durante pasajes del juego ante Danubio y Plaza Colonia, a Peñarol le llegaron con mucha gente y complicaron la actuación de la última zona. En la racha de cinco triunfos al hilo no le convirtieron goles y ahora, en dos encuentros, le anotaron cuatro tantos al aurinegro.

El ataque

Falla en las pocas chances de gol

Uno de los grandes problemas de Peñarol en este 2019 ha sido la falta de contundencia que a nivel internacional se paga caro. Si bien hubo partidos redondos para el aurinegro, las últimas actuaciones de la ofensiva no fueron de las mejores y además los delanteros llevan cinco encuentros sin convertir.