Messi fue el primero en dejar la selección y varios referentes lo seguirán.

"Si no ganan que no vuelvan", dijo Diego Maradona en la previa a la final. Así, ese ídolo de la vecina orilla se convirtió en la voz de (gran parte del) pueblo argentino y le añadió peso a la mochila que el plantel argentino carga hace 23 años.

No ganaron y ayer volvieron. Lionel Messi, entre otros jugadores, aterrizó en Ezeiza por última vez con uniforme de la selección, ya que frustrado decidió renunciar.

Uno de los mejores jugadores del mundo decidió dejar su seleccionado durante su plenitud porque considera que no es para él. Intentó ganar un título de todas formas, no lo logró y se cansó.

Messi, el referente en cancha de esa selección, marcó los pasos y son varios los jugadores que al parecer seguirán su camino: Sergio Agüero, Javier Mascherano, Sergio Romero, Gonzalo Higuaín, Ezequiel Lavezzi, Ángel Di María, Lucas Biglia, Ever Banega e incluso la continuidad de Gerardo Martino está en duda.

Pensando en el once que disputó la final, Argentina perdería al dueño del arco, tres piezas claves en el mediocampo como Banega, Mascherano y Biglia y se debilitaría mucho en ataque. Higuaín y Di María son habituales titulares, mientras que Lavezzi y Agüero aportan desde el banco.

Maradona, el mismo que pidió que no vuelvan, cierra su reciente libro "Mi mundial, mi verdad" pidiendo que no se busque un salvador en la selección "si no queremos pasar otros 30 años sin levantar la Copa". Y en modo de defensa a la "Pulga" agrega: "La pregunta, hecha desde el corazón, es: Y después de Messi, ¿qué?".

Messi se aburrió, dio un portazo a la selección y el golpe derribó otras fichas. La selección argentina tiene varias bajas relevantes y la pregunta está en el aire: ¿Y ahora qué?

Desde el debut en el año 2005 en la selección mayor, Lionel Messi ha tenido números muy buenos, aunque la espina de no ganar ningún título es la que más le duele. Once años y 105 partidos: 62 ganados, 23 empatados y solo 20 perdidos. Seis entrenadores. Anotó un total de 55 tantos y es el máximo goleador histórico de la albiceleste, superando a Gabriel Batistuta. Pero la verdadera pérdida que tendrá su selección con su ausencia escapa a los números. El astro argentino se encuentra en uno de sus mejores momentos y es la manija del equipo. Pierden mucho.

Bajo la tutela de Gerardo Martino el "Kun" perdió pisada en el once titular argentino, pero siempre está a mano para ingresar desde el banco. La calidad de Agüero es indiscutible y lo demuestra en cada partido que juega en la Premier League. Velocidad, potencia y un gran olfato goleador le dan confianza al DT, que tiene un as bajo la manga.

Ya había amagado en una oportunidad en dejar la selección pero lo convencieron y siguió. Lo hicieron cambiar de opinión porque Mascherano en cancha puede jugar en varios puestos, pero su mayor aporte es psicológico. El "Jefecito" corre, mete y contagia. Además, es un claro líder dentro del terreno y lo respetan a pesar de no llevar la cinta.

En toda la Copa América Centenario la selección argentina recibió solamente dos goles. Fue la valla menos vencida y más allá del trabajo de la defensa, una de las claves estuvo en Sergio Romero. "Chiquito" se adueñó del arco y transmite mucha seguridad a sus compañeros. Por si fuera poco, si se da su salida no hay un suplente cantado para asumir el rol.

Falló goles clave y es resistido, pero es importante en la ofensiva.

Es uno de los grandes villanos de esta selección tras fallar situaciones clave en tres definiciones y seguramente los hinchas no sientan esta baja, pero el "Pipa" es uno de los referentes en el ataque argentino. Fue goleador por destrozo en Italia y a pesar de la abundancia de delanteros argentinos (Agüero, Tévez, IcardI), su puesto es fijo.

COPA AMÉRICA CENTENARIOMATEO VÁZQUEZ