Uruguay se encontrará hoy con un frío recibimiento en Antofagasta.

Resultó una sorpresa aterrizar en Santiago a apenas tres días de comenzar la Copa América 2015 y no encontrar el aeropuerto de la capital, epicentro de llegada al torneo para muchos participantes, periodistas e hinchas, engalanado con los carteles y símbolos de bienvenida que ya suelen ser habituales en cada uno de los países que acogen este tipo de torneos. Más allá de la cartelería contratada por los patrocinadores del torneo, la promoción de la gran cita brilla por su ausencia. Sin embargo, resultó más llamativo aún aterrizar en Antofagasta, sede a la cual llegará la Celeste hoy, y no encontrar ni un sólo cartel o mensaje de aviso que alertara al recién llegado de que por allí también va a pasar la fiesta copera.

Ya entrando a la ciudad minera, el taxista trata de dar una explicación al frío ambiente de la sede. "Para apenas dos partidos que se disputan aquí, las autoridades no querrán invertir demasiado en decoración", asegura, antes de atreverse con un análisis más profundo: "La gente está tan ilusionada con la selección chilena que parece que sólo hay Copa en los lugares donde juega la roja".

Puede ocurrir que la hinchada local esté tan convencida de que este será su torneo, tanto que no le haya dado tiempo de pensar en disfrutar de su propia fiesta.

Andrés Cunha, Mauricio Espinosa y Carlos Pastorino llegaron ayer a la concentración.

El diario local La Tercera informó de que Alexis Sánchez y Marcelo Díaz casi llegan a las manos en el vestuario.

Antofagasta recibe sólo dos partidos, ambos de Jamaica: ante Uruguay y contra Paraguay.

Copa América 2015