Sebastián Coates sabe que el clásico es un partido especial y quiere que la gente reciba la alegría que se merece.

Entiende que van a enfrentar a una selección de Argentina más agresiva, pero recordó que a ese fútbol de Jorge Sampaoli ya le supieron ganar. Sebastián Coates, apenas arribado al aeropuerto de Carrasco, demostró sus ganas de: "darle a la gente la alegría que se merece".

El jugador del Sporting de Lisboa admite que jugar un clásico con un estadio lleno "es una gran responsabilidad, aunque siempre es así cuando te ponés la camiseta de Uruguay. Obvio que esto es especial, es un clásico, tiene un sabor diferente".

Coates remarca que todas las finales que hay por delante valen tres puntos, pero reconoce que este primer cotejo tiene una carga emotiva mayor. Aunque "vendrá una Argentina más agresiva, a (Jorge) Sampaoli lo conocemos bien, sabemos cuál es su idea, y ya le ganamos. Esperemos que nos vaya igual que ante Chile en el Centenario".

Valoró el regreso de Martín Cáceres a la selección celeste porque "siempre fue fundamental. Lo demostró cada vez que le tocó jugar. Ojalá que, si le toca de nuevo, sea otra vez clave".

Para Coates no habrá ningún inconveniente si a los tres valores jóvenes que fueron citados les llega a tocar entrar (Mauricio Lemos, Federico Valverde y Gastón Pereiro): "ellos ya son parte del proceso y conocen muy bien lo que quiere el maestro".

Tras remarcar que "vengo jugando, con mucha confianza", hizo especial hincapié en un hecho: "acá todos venimos a aportar, ojalá que al que le toque jugar lo haga de la mejor manera posible para lograr el objetivo".

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