Denver Broncos enfrentan a Carolina Panthers en la final del football americano.

El momento deportivo más importante del mundo llegó. Cada año centenares de millones de personas se sientan frente al televisor durante unas tres horas y media para ser testigos del Superbowl, la final del football americano, que esta noche (hora 20, ESPN y FOXSports) protagonizarán Denver Broncos y Carolina Panthers en el Levi’s Stadium de Santa Clara (California), casa de los San Francisco 49ers.

Se aguarda que unos 600 millones de espectadores sigan por televisión el espectáculo que se ha transformando en mucho más que un partido decisivo. Esta noche el Superbowl llega además a una cifra icónica: la edición 50. Y la misma puede coronar a un equipo por primera vez y también marcar el adiós de uno de los más grandes mariscales de campo de la historia.

Cam Newton lidera la ofensiva de Carolina Panthers, una franquicia relativamente nueva (1995), que aún no tiene títulos. Posee el mejor ataque de la liga. A su frente estarán los Denver Broncos, organización de 1960 que consiguió dos títulos en 1998 y 1999 con John Elway como mariscal de campo, hoy director de operaciones (manager) del equipo.

El show incluye un toque de Coldplay, en el entretiempo, del que también formará parte Beyonce. Además, el Himno de Estados Unidos antes del juego lo entonará Lady Gaga.

El partido se divide en cuatro cuartos de 15 minutos cada uno. El reloj se detiene cada vez que una jugada no se concreta o que hay una falta. Cada equipo está compuesto por 11 jugadores, con sustituciones ilimitadas de entre un plantel de 52. Si hay empate al final, se juega alargue.

Obviamente gana el equipo que más puntos convierte. El touchdown vale 6 con posibilidad de un punto extra con patada o dos por pase; el gol de campo vale 3 y el safety (atrapan al ataque en su zona de anotación) 2.

Cada equipo tiene cuatro oportunidades para avanzar 10 yardas. Si no lo hace, debe entregar el balón. Si en la cuarta no consigue el objetivo entrega el balón en el lugar del que salió. Por lo tanto, lo normal es que haga una patada de despeje o intente un gol de campo.

La ofensiva la lidera el mariscal de campo y tiene a los más rápidos y los de mejores manos para atrapar. Para defender entra un equipo de especialistas en tackles y para despejes están los equipos especiales.

Aunque es un juego muy violento, hay reglas. No se puede agarrar (hay que empujar), no pueden haber movimientos prematuros en la línea de golpeo, el mariscal de campo no puede ser golpeado luego de lanzar y hay faltas graves como tomar del casco o golpear a alguien en el piso.

El Superbowl 50 regalará el duelo entre dos mariscales de campo muy diferentes: Cam Newton (Carolina) y Peyton Manning (Denver Broncos). Se puede presentar como el choque entre el modernismo y el tradicionalismo.

Newton, de 26 años y profesional desde 2011 pero que explotó este año, no solo es un buen pasador, sino también muy ágil y un gran corredor, completando muchas jugadas gracias a su movilidad y velocidad. "Lo consideramos un corredor con buen brazo", dijo el técnico de Green Bay Packers hace unas semanas al preguntarle cómo lo controlarían.

Peyton Manning (39, profesional desde 1998), quien seguramente jugará hoy su partido despedida, es el representante de lo tradicional: gran pasador, pero sin movilidad, por lo cual necesita de su línea ofensiva para tener tiempo de lanzar.

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