El CPI no fue tan benévolo como el COI y expulsó a los deportistas rusos.

Los Juegos Olímpicos se acabaron, pero no el escándalo de dopaje en Rusia: ningún deportista ruso participará en los Juegos Paralímpicos de Río, entre el 7 y 18 de septiembre, según la decisión al recurso calificado como "más política que jurídica" por Moscú.

"El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) ha desestimado el recurso presentado por el Comité Paralímpico de Rusia contra la decisión dictada por el Gobierno del Comité Paralímpico Internacional (CPI) el 7 de agosto", señaló el TAS en un comunicado de prensa. "Como consecuencia, se confirma la decisión del CPI", prosiguió la máxima instancia judicial del deporte, con sede en Lausana.

"La decisión no está dentro del ámbito del derecho. Es más política que jurídica", declaró Mutko, en declaraciones recogidas por la agencia de prensa oficial rusa TASS.

Por su parte, el primer ministro ruso Dmitri Medvedev calificó ayer de "decisión cínica" el rechazo. "Excluir a los deportistas paralímpicos de Río 2016 es una decisión cínica motivada por el deseo de excluir a los rivales importantes", escribió Medvedev en su cuenta de la red social Twitter.

"Esta es una decisión doblemente cínica porque hablamos de personas que se superan cada día. Es un golpe duro para todas las personas discapacitadas y, no solamente, para los rusos", agregó el primer ministro. "Es triste para el deporte", aseguró Medvedev, quien afirmó que las revelaciones de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) sobre un sistema de dopaje de deportistas organizado por las autoridades rusas fue "una política dirigida contra el deporte ruso, los deportistas rusos y Rusia como Estado". "Algunos Estados y su instituciones políticas y deportivas buscan el tradicional enemigo y lo han encontrado, una vez más", prosiguió Medvedev.

"Se puede sancionar a quien sea, a los ministros, funcionarios, médicos, entrenadores, pero los deportistas paralímpicos no deberían serlo, no se lo merecen", agregó Dmitry Svishchev, jefe del Comité de Deportes del Parlamento ruso. La doble campeona olímpica de salto con garrocha Yelena Isinbayeva también expresó estar en contra de la decisión: "Queridos deportistas paralímpicos, compartimos esta injusticia flagrante con vosotros, ¡Sed fuertes! ¡Fuisteis, sois y seréis nuestros héroes!" .

Con esta decisión se muestra la brecha que separa la decisión del CPI de la del Comité Olímpico Internacional, que autorizó a los deportistas rusos a participar en los Juegos si cumplían algunas condiciones y se negó a su expulsión en bloque. El COI dejó la elección a cada federación deportiva internacional, reservándose el derecho final a decidir. En total, Rusia dejó fuera a 113 deportistas, de los cuales su mayoría eran atletas, 67 de 68 de ellos. En cambio, esta decisión no ha impedido al país que termine en cuarta posición de la tabla del medallero con 56 peseas, 19 de oro.

Algunos deportistas recurrieron a su exclusión ante el TAS y lo ganaron como Darya Klishina, la única rusa que participó en Río 2016: fue novena en salto largo.

JUEGOS PARALÍMPICOS 2016AFP