Wanderers goleó a un Peñarol frío y perjudicado por el juez.

Goleó Wanderers 4-1 a Peñarol y ese es, pese a todo lo que hay por decir, el hecho más importante. En el ranking de situaciones relevantes en el Viera le siguen el arbitraje incidental de Andrés Cunha, el buen juego del bohemio y el nuevo mal rendimiento del aurinegro. Todo en ese orden.

1. La goleada. No hay discusión sobre los merecimientos de Wanderers para llevarse el triunfo. Fue más en el balance de los 90’, pero sobre todo en el segundo tiempo, cuando dominó el mediocampo, explotó la desesperación de Peñarol, tuvo dinámica y además pegó en los momentos justos, algo que no supo hacer su rival. Abrió el marcador en el cierre del primer tiempo, le empataron en el inicio del segundo, pero enseguida volvió a convertir para cortar cualquier intento de reacción del mirasol. Tuvo la actitud del equipo grande que no mostró Peñarol. Y luego, cuando tuvo para liquidar el partido, lo hizo con categoría, dando además una gran muestra futbolística.

2. Cunha. Los técnicos suelen decir que el cambio táctico por excelencia en el fútbol es el gol. Un penal tiene un 90% de posibilidades de transformarse en un tanto y con ese razonamiento, el arbitraje de Cunha bien puede haber incidido en el resultado del partido. No cobró dos claros penales en favor de Peñarol por manos de Bueno en momentos importantes: uno a los 27’, cuando con el partido 0-0 Nández intentó escapar y la mano del zaguero cortó la trayectoria de la pelota; y otro a los 55’, cuando otra mano de Bueno se interpuso entre el cabezazo de Rossi y el arco con el juego 2-1, justo antes de que naciera el 3-1. Es cierto que a Peñarol le hicieron cuatro goles, pero también que no es lo mismo empezar 0-1, que 1-0. Cobró bien el penal a Maxi Rodríguez para el 1-1, pero sus fallos fueron más incidentales que sus aciertos.

3. Wanderers. Antes de lo mal que jugó Peñarol, es justo escribir de lo bien que jugó Wanderers. A los seis minutos ya había obligado a Guruceaga a hacer dos grandes tapadas. Se paró con inteligencia para cortar las líneas de pase, presionó y quitó cuando se dio cuenta que los jugadores de Peñarol habían optado por avanzar con balón dominado, se impuso en el juego aéreo y fueron más los mano a mano ganados que los perdidos. Tocó con inteligencia, generó los espacios, movió a la defensa rival hasta desacomodarla y liquidó pegando en momentos clave.

4. Peñarol. No es noticia que juega mal, pero luego del empate clásico, por cómo lo consiguió, se esperaba ver a un equipo motivado, convencido, que se llevara por delante a su rival... Y fue todo lo contrario. En los primeros 20’ intentó generar fútbol juntando a Forlán, Maxi Rodríguez y Valverde, pero se quedó en eso. Generó llegadas, pero no situaciones claras. Burián solo tuvo una intervención importante. Peñarol nada transmite, es un equipo frío, perdió casi todos los balones divididos (tres en la jugada del 1-0), juega poco y para peor no le otorgan los penales que genera. Así será un milagro que sea campeón.

WANDERERS 4-1 PEÑAROL 

Estadio: Parque Viera.

Árbitro: Andrés Cunha. Asistentes: Richard Trinidad y Eduardo Aguirre. Cuarto árbitro: Federico Lovesio.

Wanderers: L. Burián, A. Silva, G. Bueno, E. Díaz, M. Rivas, A. Colombino, D. Scotti, D. Riolfo (88' J. Verges), J. Cabrera (81' R. Rivero), G. Rodríguez y S. Blanco (60' S. Blanco). DT: G. Machado.

Peñarol: G. Guruceaga, M. Aguirregaray (67' N. Albarracín), C. Valdez, M. Olivera, A. Rodales, M. Novick, N. Nández, F. Valverde (60' H. Novick), M. Rodríguez, D. Forlán (46' C. Palacios) y D. Rossi. DT: J. Da Silva.

Goles: 45 + 1' G. Rodríguez (W), 46' M. Rodríguez (P), 51' D. Riolfo (W), 56' G. Rodríguez (W), 75' D. Riolfo (W).

Amarillas: 40' J. Cabrera (W), 46' A. Silva (W), 61' M . Aguirregaray (P), 70' M. Olivera (P), 78' H. Novick (P) y 86' A. Colombino (W).

Rojas: No hubo.

EN EL VIERADANIEL ROSA