La imagen —y no buena— de la jornada fue el altercado que mantuvieron los delanteros violetas una vez consumada la derrota ante Liverpool.

Nadie entendía nada, porque de repente estaban todos los jugadores y el cuerpo técnico de Defensor Sporting separando a dos compañeros. ¿Qué había pasado? La televisión dio la primera pista.

Cuando el plantel de Defensor Sporting se marchaba al vestuario, Romario Acuña comenzó a discutir con un hincha que algo le decía desde la tribuna. Atrás suyo venía su compañero, Maxi Gómez, quien también señaló algo a la tribuna. En ese momento Acuña, que era contenido por Alejandro Acevedo (asistente de campo) sale corriendo como para enfilar hacia donde estaba el hincha que le increpaba y su compañero salió detrás de él, le dio alcance y le pegó un puñetazo por la espalda.

Acuña reaccionó y allí si intervino el resto de sus compañeros para calmarlos. Luego trascendió que la discusión de Romario era con el hermano de Gómez y por eso la reacción del joven goleador.

Ahora solo resta conocer qué medidas adoptará Defensor Sporting, si es que decide tomar cartas en el asunto.

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