"Cachavacha" pisó Lima y revolucionó una ciudad que se conmocionó con la llegada del mejor jugador del Mundial de Sudáfrica 2010 y campeón de América con Uruguay en 2011.

Apenas entró al aeropuerto, ya se dio cuenta que no iba a pasar desapercibido en tierras incaicas. Los propios funcionarios del lugar se acercaban a tomarse fotos y pedirle autográfos. El "10" aurinegro, pese a que se le notaba el cansancio en la cara producto del viaje, se mostró siempre dispuesto y cumplió con todos.

Lo peor venía afuera. Ya antes de salir de la última puerta que daba a la calle, a través del vidrio polarizado, se observaba como 20 periodistas se trepaban a una baranda esperando por un testimonio: el de Diego Forlán.

Mientras el resto del plantel mirasol se trasladaba al ómnibus que los iba a llevar al hotel con total tranquilidad, "Cachavacha" se vio encerrado entre cámaras y micrófonos que le hicieron tardar más de la cuenta los 50 metros que tenía que caminar.

Con la ayuda de la seguridad del club, Forlán salió sano y salvo y se unió al resto de sus compañeros que ya lo esperaban desde hace algunos minutos en el ómnibus para llegar al hotel.

Incluso, minutos antes, algunos de ellos mientras observaban como lo agobiaban se animaron a bromear: "¡Suerte que viene el 'mostro' así nosotros caminamos tranquilos!", señalaron entre carcajadas. En Lima, están locos por Diego.

COPA LIBERTADORESÁNGEL ASTEGGIANTE (ENVIADO)