Los aurinegros disfrutaron de dos días libres tras la goleada del sábado y ya piensan en Jorge Wilsterman.

Peñarol había tenido solo dos días libres desde que comenzó el torneo Apertura. Por eso esta vez los futbolistas aurinegros disfrutaron de dos días seguidos de descanso: ayer y hoy.

Esto se debe entre otras cosas a que el fin de semana no juegan, porque como es de público conocimiento el clásico que debía jugarse en la quinta fecha, fue postergado. Y seguramente, también porque se lo merecen tras la goleada que le propinaron a Wanderers el sábado en el Parque Viera.

Ahora comienza otra historia para los carboneros: la de la Copa Libertadores. El debut frente a Jorge Wilsterman está a la vuelta de la esquina y es siempre un motivo de gran ilusión para los hinchas y también para los propios jugadores. Mañana, cuando regresen a Los Aromos lo harán pensando en el partido frente al equipo boliviano.

Entrenarán todos los días, incluso sábado y domingo preparando el estreno copero. El domingo viajarán a las 19:45 horas rumbo a Buenos Aires. En la vecina orilla tendrán poco más de dos horas de espera hasta volver a embarcar rumbo a Santa Cruz de la Sierra.

El lunes viajarán hacia los 2.574 metros de Cochabamba. La idea de los aurinegros era viajar el martes, el mismo día del partido, pero la nueva reglamentación de la Conmebol no lo permite. Y hay que estar un día antes. El debut copero del equipo de Leonardo Ramos será el martes 7 de marzo a las 19:30 horas de Uruguay.

“Aviador”. A propósito de Jorge Wilstermann, viene de caer el viernes frente a Guabirá en su propio estadio, el Félix Capriles, por 3 a 2. El equipo “aviador” marcha séptimo en el torneo, tras cinco fechas disputadas. Suma seis puntos producto de dos victorias. Los otros tres partidos los perdió. Este último frente al líder del torneo.

Peñarol necesitaba como el agua una victoria como la que consiguió el sábado en el Parque Viera. Para no perder pie en el torneo Apertura, donde venía de dos empates, y también para llegar bien a la Copa Libertadores, que siempre significa mucho para los carboneros porque así lo marca su rica historia.

Cabe recordar que en la presente edición de la Copa, cada equipo llevará en su camiseta un parche, con el número de copas ganadas. Y Peñarol, con sus cinco Libertadores será el más laureado de los equipos participantes esta vez.

El partido frente al equipo bohemio fue el mejor del equipo de Ramos en el Apertura hasta ahora. Aunque él técnico haya insistido en que la única diferencia entre la goleada frente a Wanderers y los dos empates sin goles ante Liverpool y Boston River fue que en el Viera la pelota entró.
“Se jugó un poco mejor porque el partido lo pasamos a ganar enseguida y eso hace que el rival se tenga que abrir. Pero para mí los mejores partidos son los que ganás y mantenés el cero en el arco. Y esta vez se dieron las dos cosas”, dijo Ramos. Quien más que los cuatro goles de su equipo, todos anotados por los atacantes que aún no habían podido marcar en el Apertura, destacó el cero en su arco.

“Es el cuarto partido consecutivo con cero en nuestro arco y eso algo que no es nada fácil. Y es importantísimo”, enfatizó.

“Estoy muy contento con los goles de los atacantes. Pudieron meter goles los que tiene que hacerlo, pero más feliz me pone el cero en nuestro arco. Porque es en base a eso es que se cimientan los resultados. Mantener el cero frente a Wanderers que es un rival muy difícil, fue muy importante”, insistió el técnico.

Ramos suele decir que no acostumbra hacer muchos cambios en sus equipos. Sin embargo, los hizo para enfrentar a Wanderers, más allá del regreso de Nahitan Nández tras cumplir su suspensión. Le dio ingreso desde el arranque al “Cebolla” Cristian Rodríguez y también a Junior Arias que no había sido titular en los tres primeros partidos del torneo. Y los cambios dieron resultado.

“Cambié porque íbamos a jugar de otra manera. Al jugar con volantes más internos, necesitábamos más vuelo por los laterales y por eso pusimos a Alex Silva. Creímos que nos podía dar ese resultado y lo hizo”, explicó sobre la sorpresiva salida de Hernán Petryk del plantel. “Todos están para jugar. Hicimos cambios para mejorar y el resultado fue muy bueno. Le hicimos cuatro goles a Wanderers. Creo que fue porque abrimos el partido muy rápido”, reconoció.

Al final, aseguró que las variantes no tuvieron que ver con la impaciencia de la gente que había comenzado a sentirse tras los dos empates registrados. “No hemos tenido semanas difíciles desde que estamos en Peñarol. La gente se da cuenta de la actitud, del esfuerzo y la de la intención de jugar”.

SILVIA PÉREZ

PEÑAROLSILVIA PÉREZ