Básico: 12 estadios FIFA; Uruguay, que debería tener 4, irá por el Mundial Femenino Sub 17.

Antes de irse de Uruguay, el presidente de la FIFA dio señales de esperanza sobre la posibilidad de que nuestro país y Argentina organicen el Mundial de 2030, dejó una pista acerca de cuándo se tomará la decisión de la adjudicación de la sede y, en un encuentro con empresarios rioplatenses, advirtió que hay que "invertir... e invertir" para aspirar a lograrla.

En la reunión con Tabaré Vázquez en la residencia de la Avda. Suárez en presencia de Wilmar Valdez y Alejandro Balbi, presidente y secretario de la AUF; Fernando Cáceres, director Nacional del Deporte; y su par argentino, Carlos Mac Allister, enviado del gobierno de Mauricio Macri, el suizo Gianni Infantino dijo que, si bien —según los nuevos estatutos— el titular de la FIFA no vota en la elección de la sede de los mundiales, su opinión personal sobre el tema era contraria a la de sus antecesores, pues considera que pueden ser organizados en forma conjunta por más de un país, ya que cada vez son menos los que se encuentran en condiciones económicas de hacerlo, espectro que se reduciría aún más si en el futuro llegan a contar con 40 participantes.

Infantino informó, además, sobre el calendario estimativo de votaciones para la elección de las sedes de los próximos mundiales, precisando que la adjudicación del 2026 se hará en el congreso de FIFA que se reunirá en 2020, mientras que que la del 2030 será nominada en 2024.

En otro orden, el presidente de FIFA escuchó,sin expedirse, lo expresado por Vázquez y los dirigentes uruguayos en el sentido de que en Argentina y nuestro país se alberga la esperanza de que la designación de la sede del 2030 se decante "de manera natural", según dijo Cáceres, y que se produzca "sin que se llegue a la votación tradicional", sino por una decisión de la FIFA para que en los 100 años se vuelva a donde nació la historia de los mundiales.

Infantino planteó la posibilidad de que el tema del fútbol se incluya en algún foro que reúna a los jefes de Estado sudamericanos, y la iniciativa fue recogida por Vázquez, quien —como presidente de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR)— asumió el compromiso de proponer en la reunión de los 12 mandatarios del bloque el 22 de abril en Ecuador, que para el encuentro de Montevideo en junio por el cambio de mando de la presidencia del Mercosur se hagan talleres conjuntos con representantes de FIFA sobre "La Educación, el Deporte y el Fútbol", y reuniones con empresarios como los que ayer lo escucharon en el Hotel Dazzler.

En esa otra cita, Infantino dijo que "el fútbol es el mejor espectáculo del mundo", pero advirtió que para hacer un Mundial hay que "invertir e...invertir", quedando claro que para lograrlo hay que tener 12 estadios FIFA, y que para 2030 nuestro país debería contar al menos con cuatro.

En ese rumbo, Uruguay se postulará para el Mundial Femenino Sub 17 del próximo año: un partido eliminatorio para jugar "la final del 30" en el congreso de FIFA de 2024.

"Una reunión muy distendida", dijo Balbi sobre la cita con Vázquez, a la que Infantino fue "muy dispuesto al saber que había sido presidente de un club chico que salió campeón uruguayo". Así, propuso un partido de mandatarios de América y Vázquez ofreció la cancha de la mansión de Suárez. Por el 2030, Balbi ya habló con Tinelli y el secretario del presidente de AFA.

FIFAJORGE SAVIA