Mathías Saavedra había dejado de jugar; River Plate lo recuperó y él se lo agradece a fuerza de goles.

Mathías Saavedra llegó en junio a River Plate. Lleva seis goles en los últimos cinco partidos, dos de ellos a los grandes. Le esta muy agradecido a los darseneros, que lo rescataron cuando había tomado la decisión de colgar los zapatos.

El semestre pasado, el delantero estuvo muy bajoneado porque perdió a su padre y había decidido dejar de jugar. En ese momento ya había tenido posibilidades de ir a River Plate, pero aún era jugador de Sud América y no se concretó.

"Estaba el tema de mi papá y no quería saber nada de fútbol, ya lo había decidido. No iba a jugar más. Me había bajoneado mucho por lo mi padre y en el fútbol se necesita estar al 100% todos los días y levantarse siempre con la cabeza bien. Hay que estar de lunes a lunes muy concentrado y había veces en que no tenía fuerzas. No me sentía con ganas", contó Mathías en la casa que comparte con su madre en Villa Española.

"Después, de la nada, sin buscarlo ni pensarlo llegó lo de River otra vez y no podía decirles que no. Es un equipo hermoso y estaba Carrasco. Hice un click, me puse las pilas, y hoy a los 27 años, es cuando más estoy disfrutando del fútbol. Recuperé las ganas y hoy quisiera tener 23 años, pero con la cabeza que tengo ahora. Yo maduré recién a los 25 con lo que pasó con mi padre, antes no valoraba tanto las cosas, no le daba la importancia que se merece el fútbol. Hoy vivo para el fútbol, para mi familia, para otras cosas. Te cambia la cabeza", agregó.

Es que Saavedra ha tenido un largo recorrido en el fútbol. Jugó en Boca, y tuvo dos pasajes por el fútbol español. "Viajar te abre la cabeza, ver otro fútbol, otra gente. A veces uno acá se lleva todo por delante y cuando vas a otro lado te pasan por arriba. El ritmo es otro y ahí te das cuenta lo lejos que estamos. A veces uno ve un partido del fútbol español y vuelan. Entonces, te das cuenta lo mucho que tenemos por mejorar", reflexionó.

En una de sus etapas en el fútbol argentino fue dirigido por Caruso Lombardi en Tristán Suárez. "El equipo se había armado para ascender, nos fue muy bien, pero perdimos la final del ascenso. Caruso es de esos técnicos que está bueno tener alguna vez. Es un personaje que tiene un circo armado, pero con los jugadores es muy buena gente. No tengo ninguna queja", relató el delantero.

"Hacía lo que quería. Caía una hora tarde a las prácticas. Y una vez estábamos por empezar el torneo, en plena pretemporada y cuando faltaba una semana para arrancar se fue para Miami. Cayó el día antes del partido todo bronceado, de camisa floreada y bermudas. Son cosas que tiene él y que se las bancan porque es Caruso. Pero con nosotros fue muy buena gente", añadió.

Tiene seis meses más de contrato en River Plate y por ahora su intención es quedarse, pero no descarta volver a hacer las maletas. "Me encantaría quedarme acá y que se pudieran manejar los niveles de sueldo que se manejan en otros lados. Acá jugás en Primera, te matas y ganas menos que en un local de ropa y uno está metido en esto desde los seis años. Por eso uno siempre busca salir, pero más allá de eso, a mí me encanta Uruguay".

Arrancó el baby fútbol en el club Rocha. Jugaba de ocho, pero como la cancha le quedaba grande se fue para arriba. "No me acuerdo si fue un técnico que me cambió, pero me gusta ser delantero y hacer goles, si no me aburro. No me gusta marcar", admitió. Hizo todas las inferiores en Nacional, desde Pre Séptima hasta que a los 16 años cuando cruzó el charco y se fue a Boca Jrs. a préstamo. Volvió a a terminar el contrato y llegó a jugar un partido en Primera tricolor por una Copa de verano. Luego regresó a Boca donde estuvo dos años más. "Fue una experiencia divina. Tengo muy buenos recuerdos, a los 18 años salimos campeones de un Mundial en España. Le ganamos a Barcelona en semifinales y a Real Madrid en la final con gol mío", relató orgulloso.

"Por más que digan que Peñarol jugó mal y que no fue a la cancha, los que los pasamos por arriba fuimos nosotros", afirmó sobre el triunfo de River ante Peñarol. Y elige sus goles a los grandes y uno que le hizo a Racing de afuera del área.

SILVIA PÉREZ

LA FIGURASILVIA PÉREZ