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Una dupla familiera

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Foto: Fútbol Florida

NACIONAL

Martín Ligüera dirigirá la reserva tricolor junto a su hermano.

En un abrir y cerrar de ojos Martín Ligüera decidió retirarse del fútbol y empezará su carrera como entrenador, ya que dirigirá la Tercera División de Nacional que dejó el “Cacique” Medina.

El floridense, que días atrás emitió un comunicado en el que se despidió de Nacional y que tenía la posibilidad de seguir jugando al fútbol en Fénix, aceptó la propuesta tricolor y en la reunión del lunes de noche el gerente deportivo Alejandro Lembo le transmitió la noticia a los dirigentes.

En Nacional no querían perder la figura de Ligüera en el club, por su don de gente y por lo referente que es desde todo punto de vista. Por ello, se pensó en él para hacerse cargo de la reserva alba.

Además, hay varios puntos positivos que la directiva evaluó para ofrecerle el cargo; a saber: su idea de juego, que es similar a la que propone Medina (se busca tener un hilo conductor de estilo en todas las formativas); su personalidad y su identificación con la institución -es un producto genuino de las formativas-; es muy amigo del “Cacique” y trabajarán “espalda con espalda”, según señalaron desde el club.

Esta noticia generó mucha alegría en los directivos y también en el ahora exjugador, que está contento de dar este paso en su carrera.

Ligüera acaba de terminar de realizar el curso de entrenador, por lo que en 2018 podrá entrar a la cancha.

Además, en su cuerpo técnico estará acompañado de su hermano menor Diego, que ya hace un año está trabajando en Nacional: era el encargado de realizar el scouting de los rivales de Tercera División y también de formativas. Diego realizó las juveniles en Wanderers, hizo una pretemporada con Fénix en Primera (cuando lo dirigía Jorge Giordano) y luego jugó en una Tercera de Danubio que la conducía Alejandro Garay. Tras ese paso por los franjeados se fue a jugar al fútbol del interior y actualmente es una de las figuras de Candil de Florida. Finalizó el curso de entrenador en 2016 y dirigió a la Quinta de Huracán del Paso de la Arena y a varias categorías de su querido Candil.

Resta por definir quién será el preparador físico para terminar de armar un cuerpo técnico que se armó rápidamente teniendo en cuenta las circunstancias. Se espera que en estas horas se defina.

A los 37 años, Ligüera cierra así una gran carrera, en la que pasó por 12 clubes de ocho países, además de su pasaje por las selecciones uruguayas.

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