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Cambió el viento

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Diego Polenta

EN EL VIERA

Nacional y Wanderers siguen en racha: uno gana, el otro no.

Bien dicen que en el fútbol hay rachas y momentos. Y vaya si lo sabrán en Nacional, en este Nacional que sumó su tercera victoria al hilo en el Clausura y marcó 12 goles en apenas tres partidos.

Ayer, el tricolor, despachó a Wanderers en el Viera. Volvió a ser efectivo, contundente, un equipo que mostró buen funcionamiento colectivo y tuvo individualidades gravitantes.

El equipo de Martín Lasarte sigue en racha positiva, después de haber pasado por una seguidilla nefasta en cuanto a goles y funcionamiento. De hecho, esa racha adversa lo alejó de todo: de la cima de la Anual y de los primeros lugares en la tabla del Clausura.

Nacional ganó con más luz en el juego que en el marcador, y no se baja en su pelea.

No pudo golear, como lo había hecho la semana pasada ante Liverpool y frente a Boston River, rivales a los que despachó sin problemas.

Le hizo cuatro al negriazul en Belvedere y cinco a al verdirrojo en el Centenario.

Ayer le hizo tres al bohemio y sumó 12 goles en apenas tres juegos, cuando en su peor momento sólo había podido anotar cinco goles en seis fechas, de la segunda a la séptima, cuando cayó ante El Tanque Sisley en el Parque Central por 2-1.

Pero aquella mala racha quedó atrás. Nacional se rehizo. Volvió a sus raíces, y hoy se parece a aquel equipo demoledor que peleó el Apertura cabeza a cabeza con Defensor y estuvo liderando la tabla Anual a paso firme.

Lasarte apostó a sus hombres. Los respaldó, los bancó y hoy la respuesta se ve en el campo de juego, porque Rolín se hizo importante en la zaga, porque Espino levantó mucho su nivel, y Rodrigo Aguirre empezó a hacer estragos en las defensas.

Wanderers fue más de lo que se esperaba. Principalmente, por lo que había cosechado antes de este duelo ante el tricolor.

Hizo un buen partido, jugó de igual a igual, por momento manejó y tuvo la pelota, pero careció de profundidad. Y fue clave.

Jorge Giordano armó una estrategia y se cumplió, en parte. El bohemio trabajó mucho, pero concretó poco, además, el rendimiento del ‘Chapa’ Blanco fue muy pobre y sufrió mucho por el lateral derecho en la contención, cuando Nacional cayó por el sector de Lima.

Los goles marcaron la diferencia. En definitiva, eso es el fútbol. Y fue Nacional el que desniveló en el área con tantos de Zunino, ‘Papelito’ Fernández y Polenta.

El bohemio se puso a tiro. Primero, cuando lo empató con gol de ‘Nacho’ González (33’) y con el descuento de Gularte (83’) pero la diferencia en el juego fue más, mucho más amplia que en el marcador.

Wanderers maquilló el resultado, pero no pudo ocultar la realidad. La racha adversa del tricolor parece haberla heredado el bohemio.

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