El presidente se reunió con Neymar en pleno vuelo hacia Nueva York; parte de la prensa catalana revela que hay preocupación por el interés del PSG.

La posible partida de Neymar del Barcelona sacude los medios de prensa en el mercado de pases europeo. ¿Un rumor? ¿Un tanteo? ¿Una jugada del PSG? Hay silencio en las partes involucradas porque ni los dirigentes del club francés, ni del club catalán, han dicho nada. Y menos, obviamente, Neymar. El único que habló fue Unai Emery, el entrenador del PSG, y lo hizo como para hacer ruido en una entrevista concedida a L’Equipe:

“Si queremos rivalizar con el Bayern, con el Barcelona, con el Real Madrid y ganar la Liga de Campeones, el PSG tiene que tener uno de los cinco mejores del mundo. Tratamos de que uno de ellos firme este verano”, dijo Emery. Y dio un paso más: se refirió puntualmente al brasileño del Barcelona. “Neymar progresó mucho y ahora forma parte del top five del mundo”, indicó.

“El presidente y el club trabajan desde hace años para conseguir a los mejores jugadores. El equipo, pero también los hinchas, estarían contentos de contar con uno de ellos, además de las figuras que ya tenemos”, agregó Emery sobre las posibles contrataciones como Aexis Sánchez, y Mbappé, además del propio Neymar.

Mientras tanto, Neymar, quien aún no se pronunció sobre el tema, se encuentra en Estados Unidos, donde Barcelona disputará tres amistosos: el primero, este sábado frente a la Juventus, y está junto a sus compañeros como si nada, pese a que el diario Folha de Sao Paulo anunció que el padre del futbolista viajó a París para tratar de cerrar la negociación que rondaría en los 600 millones de dólares.

Para contratarlo, el PSG debería pagar la cláusula de rescisión de Neymar, que asciende a los 256 millones de dólares (222 millones de euros). Pero la apuesta es aún más fuerte: darle un rol protagónico al brasileño, ese que no puede tener en España eclipsado por la figura de Lionel Messi. Además, el club francés le asegurará a Neymar un vínculo por cinco temporadas, en las cuales acumulará 353 millones de dólares brutos. Por eso, se habla de una operación de 609 millones de dólares, en un pase que sacudiría el fútbol de Europa.

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