Publicidad

El aurinegro tiene otra columna

Compartir esta noticia
Foto: Archivo El País

PEÑAROL

El equipo aurinegro tendrá siete “caras nuevas” respecto al encuentro clásico del Torneo Apertura.

Es otro equipo. Este Peñarol del Clausura poco tiene que ver con el que jugó el pasado Torneo Apertura. Cambió. Sufrió una metamorfosis importante, hoy tiene una columna vertebral diferente, con “caras nuevas”.

Dawson por Guruceaga en el arco, Guillermo Varela por Petryk en el lateral derecho, Fabricio Formiliano por Yefferson Quintana en la zaga, Walter Gargano por Ángel Rodríguez en el mediocampo, Estoyanoff por Gastón Rodríguez, Maximiliano Rodríguez por Junior Arias y Lucas Viatri por Mauricio Affonso.

Siete de once. Más de medio equipo quedó por el camino entre el Apertura y el Intermedio, y con esta nueva integración, Peñarol saldrá a jugar el segundo clásico oficial del año, el del Uruguayo, el que pesa en todas las tablas y en las estadísticas, el que puede estirar la racha de Nacional o cortarla.

Leo Ramos lo sabe, y paró el probable once en cancha. El único que trabajó diferenciado (por precaución) fue Gargano, el resto, parece estar confirmado para el juego del domingo: Dawson, Varela, Formiliano, Arias y Lucas Hernández, Estoyanoff, Gargano, Guzmán Pereira y “Cebolla”, “Maxi” Rodríguez y Viatri. De ahí, no se mueve.

El triunfo del domingo sirvió para evaluar y apuntalar al equipo clásico. “Fue un apronte hermoso, ganar siempre da fuerzas y respalda el trabjo”, dijo tras el encuentro con Wanderers.

Y Ramos dio un paso más, ya mirando el horizonte clásico. “Acá el objetivo siempre fue el mismo. En Peñarol no podés pelear otra cosa que no sea el título. Esta serie de victorias ayudan, pero seguimos con los pies sobre la tierra, confiando en el plantel, pero sabemos que falta mucho por jugar. Ahora lo que queda es trabajar para ponerse a pensar de lleno en el clásico. Yo siempre lo dije. Incluso en Danubio: los clásicos no hay que jugarlos, hay que ganarlos”, señaló el entrenador aurinegro.

“Cuando me tocó enfrentar a Nacional nunca puse en la balanza la racha. Peñarol tiene muchos jugadores han jugado este tipo de partidos y no les va a pesar. Tampoco les pasaba a los que estaban antes, pero hay más experiencia”.

Es cierto. Peñarol sufrió una metamorfosis. Tiene otra columna vertebral. Cambió siete de once.

Hay otras manos
De Guruceaga a Dawson
Fotos: Archivo El País

El cierre del Intermedio no fue bueno para Gastón Guruceaga. Lejos de su nivel y con el pase muy cerca de concretarse, Ramos se la jugó por Kevin Dawson. El arquero ha respondido con creces. Fue clave ante Liverpool. Tiene un solo gol en contra.

Solvencia y experiencia
De Yeferson Quintana a Fabricio Formiliano
Fotos: Archivo El País

La defensa tuvo variantes. Guillermo Varela se ganó un lugar en el lateral derecho y Fabricio Formiliano llegó para aportar solvencia y experiencia en lugar del juvenil Yefferson Quintana. Arquero, lateral y zaguero, le dieron mayor consistencia al fondo.

El medio también sufrió variantes
De Walter Gargano a Ángel Rodríguez
Fotos: Archivo El País

Walter Gargano se sumó al doble-cinco aurinegro en lugar de Ángel Rodríguez, y en lo que va del Torneo Clausura ha sido de los puntos más importantes del equipo. Tiene mucha experiencia, voz de mando y es muy táctico. Le dio marca, y también salida. Sabe con la pelota.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Peñaroltorneo clausura

Te puede interesar

Publicidad

Publicidad