Los Cleveland Cavaliers vencieron a los Golden State Warriors gracias a un gran partido de LeBron James y un doble en los últimos segundos gracias a un doble de Kyrie Irving.

LeBron James volvió a hacer de las suyas. Como en la final de junio pasado de la NBA , Cleveland derrotó por margen mínimo a Golden State en un partido espectacular, por 109-108 y con un doble vital de Kyrie Irving sobre Klay Thompson a falta de 3,4 segundos para el final.

LeBron estuvo de nuevo inmenso con 31 puntos, 13 rebotes y 4 asistencias, y una jugada de su sello: sobre el cierre del segundo cuarto, convirtió un doble y cayó de espaldas bajo el tablero; se levantó tan rápido como pudo, chocó con su compañero Richard Jefferson y llegó con lo justo para meter una tapa perfecta a Andre Iguodala, todo en la misma acción. Espectacular.

El base Kyrie Irving fue el verdugo de los Warriors con dos dobles en los últimos 37 segundos para completar la remontada de los Cavaliers, que llegaron a estar 14 puntos por debajo (80-94) en el comienzo del cuarto periodo. Kevin Durant, la gran adquisición de Golden State, falló un intento de triple cuando sonaba la bocina en el último tiro del partido.

Por otra parte, James superó la barrera de los 300 puntos en partidos disputados en el Día de Navidad y ahora tiene ya 301, para formar parte del selecto club donde sólo están los legendarios Kobe Bryant y Oscar Robertson.

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