Hace unos días estaba hablando con amigos tuercas sobre el futuro de la conducción y la llegada, en un futuro cercano, de los vehículos autónomos, o sea que no van a necesitar conductor.

Sin ningún tipo de duda, va a ser una revolución, pero extrañamente es un tópico del que casi no queremos hablar. Esas máquinas van a cambiar fundamentalmente la movilidad de nuestras vidas y pocos quieren pensar en ello ahora.

Mi visión sobre estos vehículos está totalmente metida dentro de una neblina pesada y tal vez no lo queramos discutir, porque es algo demasiado grande e importante para nosotros, los entusiastas de la conducción deportiva y segura. ¡Hay tantas cosas a considerar!

¿Qué va a pasar con las pruebas a los conductores para sacar la libreta, qué va a pasar cuando la mayoría de los vehículos se conduzcan por si solos? Inevitable y gradualmente, la habilidad para conducir va a ser una técnica muy rara. No me imagino yendo por la ruta, leyendo una revista o tomando un café, con mi espalda hacia la ruta y el auto conduciéndose solo.

Pero va a llegar y me asusta, aunque las investigaciones dicen que va a ser mucho más seguro que ahora.

MI OPINIÓN - FERNANDO PARRADO