Los smartphones, se han convertido en la distracción por excelencia de los conductores. De hecho, de todos los aspectos adversos del dispositivo, los accidentes que causa su uso durante la conducción son el más habitual.

Realizar una llamada aumenta entre cinco y diez veces la posibilidad de sufrir un accidente y se compara con conducir bajo una tasa de alcoholemia de 1,0 g/L. Interfiere en las habilidades y reflejos, altera la distancia de seguridad y reduce hasta la mitad la capacidad de percibir las señales de tráfico. ¡Además, durante el uso de aplicaciones como WhatsApp y Facebook, el riesgo se multiplica por cuatro! Se recomienda prescindir absolutamente del teléfono durante la circulación, evitando su uso incluso cuando el tránsito se detiene. No obstante, en caso de suma necesidad, se recomienda el “manos libres” para conversaciones de emergencia. La capacidad de concentración disminuye a los cinco minutos.

Seguro que usted va a pensar: “A mí no me va a pasar”. Muchos que pensaban igual son donadores de órganos o han sido causantes de la muerte de otras personas.

Por su bien y el de todos, no use celular cuando maneje.

MI OPINIÓNNANDO PARRADO